|
|
Mayo 2010 - Francisco Ramos |
|
|
Una tercera parte de nuestra existencia nos la pasamos durmiendo. Es mucho tiempo para no prestar atención a lo que sucede durante esas horas. Los sueños han despertado siempre un gran interes. Las interpretaciones van, desde las más científicas, que lo definen como una mera función biologíca, hasta las más espirituales, que hablan de viajes astrales.
|
|
|
|
|
|
¿Qué es la vida? Un frenesí. ¿Qué es la vida? Una ilusión, una sombra, una ficción, y el mayor bien es pequeño: que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son.
Calderón de la Barca La vida es sueño
|
|
|
|
|
|
I had a dream |
|
|
|
|
|
Sí, he tenido un sueño en el que un ejército con paso frenético tomaba las calles. No iban de uniforme, llevaban buenas ropas, maquillaje y agradables fragancias. En sus ojos se percibía el vacío, pues miraban sin ver.
|
|
|
|
|
|
No tenían fusiles, sólo algunas monedas que a modo de munición gastaban lanzado a todo lo que se les presentaba. Como presa algunas mercancías manufacturadas por algunos desposeídos, que eran metidas en bolsas de múltiples colores y formas diversas.
Noté un muro invisible que lo circundaba todo, era un mundo claustrofóbico, hecho a imagen y semejanza de nosotros mismos. Cada objeto que percibo es propiedad de alguien, ya sea un pensamiento, un escrito, una canción…
De repente, estoy en un gran almacén, y creo oír algo así: “Les recordamos a nuestros clientes que si su compra es superior a 29 euros entrará en el sorteo de un viaje a ninguna parte”. Nadie presta atención.
Todo parece preciso, pero no fluye. La tercera dimensión desaparece, ahora la realidad es un mundo reflejado en un espejo y como fantasmas tocamos sin tocar, besamos sin besar. No puedo substraerme a la idea que estamos muertos, que alguien o algo nos quitó la vida y nuestra caja es nuestra mente.
Entonces llegó el siguiente pensamiento: “Deslumbrado por la estrella, muerto por la cruz y cortado por la media luna”.
Siento como los gusanos a modo de pensamientos degustan mi cerebro y recorren mis venas, como automóviles en una carretera saturada de vehículos y alcanzando todos lo rincones de mi cuerpo.
Despierta, despierta, despierta. Rompe el muro, no ves que está hecho de hielo y que al calor del amor se funde, pues que son las lágrimas sino el resultado del deshielo... |
|
|
|
|
|
|
|
|
|